No cabe duda de que desde la llegada de Internet y los dispositivos móviles, los hábitos de consumo están cambiando: ya no se basa en la simple mirada de artículos en la tienda física que culmina con una compra segura, sino que el consumidor descubre y explora los productos, además de informarse sobre las marcas, todo ello a través de la red. Y este proceso supone nada menos que el 75% del proceso de compra. Por eso, realizar una buena estrategia de marketing digital puede resultar decisivo para el negocio. Pero ¿dónde se deben concentrar los esfuerzos?
Según revela un estudio realizado por Catalyst, 9 de cada 10 usuarios consultan los productos y las marcas a través de buscadores de manera habitual antes de realizar una compra, y un 72% confiesa confiar en los resultados que obtiene, es por ello que muchas empresas deciden contratar expertos en redes sociales que se forman previamente en un máster en marketing digital o máster en redes sociales. También los usuarios buscan en internet sus aliados a la hora de comprar un regalo para otra persona: el 21% de los habitantes de una comunidad autónoma como La Rioja, que cuenta con un 74,9% de usuarios frecuentes de internet (un porcentaje reducido si se compara con otras comunidades como Madrid, donde asciende al 82,4%), confiesa haber recurrido a las plataformas de internet para buscar qué regalo hacer en el Día de la Madre, según un estudio publicado por DaWanda.es. Por eso, tener visibilidad en buscadores se ha convertido en una parte esencial de todo negocio embarcado en el marketing digital, siendo el SEO y el SEM un proceso clave de los e-commerce que quieren construir una buena imagen de marca, atraer nuevos clientes y fidelizar a los que ya tiene.
Las redes sociales también deben constituir una parte importante de toda estrategia de marketing digital, ya que gran parte de la reputación de una marca en internet se construye a través de ellas. En el proceso de compra, el 85% de los usuarios de internet confiesa hacer uso de estas plataformas para descubrir productos y como elemento decisorio en la compra. De hecho, el 81% de los encuestados por Catalyst reconoció haber comprado algún producto cuyo conocimiento se basaba en lo que había visto en redes sociales.
Según un estudio publicado por Nominalia, el 8 de cada 10 consumidores otorgan el máximo valor a las valoraciones de otros usuarios, teniendo en el caso de los e-commerce tanta importancia la valoración del producto como del propio negocio. Pero no solo las opiniones de terceros tienen importancia, la que emite la compañía tampoco puede quedar descuidada: el 43% de los usuarios confiesa que en alguna ocasión la publicación realizada por el comercio resultó decisiva en que realizase la conversión y el 30% afirmó haber comprado algún producto gracias a la visibilidad del mismo en anuncios de redes sociales.
Estos datos no hacen más que corroborar la importancia cada vez mayor que está adquiriendo el marketing digital no solo para los e-commerce, sino para negocios y marcas en general, ya que investigar en la red se ha convertido en un elemento más –y cada con mayor importancia- del proceso de compra. Ya lo advertía el nuevo dicho popular “si no está en Google, no existe”.
